martes, octubre 07, 2008

Desventuras Bañísticas (or There and Back Again)

Vuelvo a las andadas. Nuevamente un posteo kilométrico, para aquellos que lo extrañaron. Y para los que no... Pues nada, también va a ser de exagerada longitud.
Comencemos por el principio, como suele corresponder.

Septiembre
Domingo 7
Tras despedir a Jose de mi reciente hogar, me encuentro con vecinos de abajo tocándome la puerta. Cuando me ven llegar, me increpan sobre obras que pudiera estar yo haciendo en el departamento. Mi negativa parece convencerlos.

Sábado 13
Llego a la 1.30am, luego de la clase de danes, y me encuentro con un cartel pegado en mi puerta que rezaba algo así como
Se nos hizo una catarata sobre uno de los tomacorrientes. Llamá a la administración urgentemente.
Entré en mi casa y me encuentro con el agua cortada. Hice lo pedido en la nota, pero parece que la gente de la administración no atiende en esos horarios... Habrase visto. La gente de este país no quiere trabajar.
Al levantarme, y tras hablar con Graciela -la administradora-, quien me aseguró que el lunes a primera hora iban a venir los plomeros, habían habilitado el agua un rato, cosa que aproveché para bañarme y lavar el dobok rápidamente. Luego, sobrevino nuevamente el corte.

Domingo 14
¡Feliz Cumpleaños a mí!

Lunes 15
Me levanto temprano -muy temprano si consideramos la hora a la que me acosté por el torneo del día anterior. Por alguna razón que todavía no logro entender, había supuesto que era un trabajo mínimo el que debían hacer. Llamé a la oficina para avisar que iba a llegar tard... Me corrijo: aún MÁS tarde que lo usual; y me siento en la compu a esperar que pase el temblor, como dirían tres jóvenes de locos cabellos ochentosos -década que bien podría ser salteada de las páginas de la historia.
14:15 vuelvo a llamar a la oficina para avisar que siguen rompiendo el piso y no voy a llegar a la oficina en ningún horario coherente.
Para esa hora, la mitad de las losas habían desaparecido del piso de mi baño y el origen del mal estaba a la vista: un caño maestro del edificio estaba casi completamente carcomido y podrido.
Se hacen las 16 y escucho una fatídica frase: ¡Parece que vas a tener que dormir sin baño! ¡SIN BAÑO! ¿Entienden la gravedad del asunto? Uno puede vivir sin luz o sin gas. Sin agua se complica, pero llega a ser posible. ¿Pero sin baño? ¡No señor!
Al instante puse el grito en el cielo -o en el techo del edificio, que está ahí nomás, en realidad- y vino la administradora, quien muy cortezmente me pidió encarecidamente que no rompiera las pelotas, que no me quedaba otra. Entonces me di cuenta de la verdad: a partir de ese momento, era rehen del plomero y su tropa...

Martes 16
Teniendo una reunión en el laburo de la que no me podía desligar, tuve que recurrir a mi hermano, quien amablemente se quedó a cuidar la guarida mientras mis sueños de independencia se veían cohartados.
En este día sólo extendieron la desgracia hasta la pared que da al departamento de al lado, siguiendo la trayectoria del caño. Para hacer esto, sacaron el mueble de la cocina, dejándome así sin un lugar para lavar platos y demás.

Jueves 18
En esta oportunidad fue Jésica (mujer de Luis y co-dueña del departamento) quien se quedó a cuidarlo, aprovechando el rato para estudiar. Desde ya, eso fue lo único que no pudo hacer; no por el ruido de los plomeros, dado que poco y nada hicieron, sino porque cada dos por tres venía alguien a ver el espectáculo del caño podrido y se quedaba charlando con ella.
Ahora bien, me enteré de una historia graciosa -in a not_funny_at_all way-: Antes de mudarse, Luis y Jesica mandaron arreglar la plomería del departamento. Cuando estaban arreglando los caños de agua del baño, tanto la arquitecta a cargo como los plomeros de turno hicieron notar el deplorable estado del caño en cuestión. Se le informó de esto a la administración, quien notó el problema, pero lo descartó con un "no hay plata" que tanto resuena en este país.
¿Creían que ahí terminaba el asunto? ¡No, señor!
Resulta que un día antes del casamiento de los antedichos, a los vecinos de abajo les cae agua como una catarata sobre un tomacorrientes. ¿Suena conocido? Es casi un copy-paste de lo que dice por allá arriba. En fin, fueron los plomeros, les levantaron el piso y el problema se solucionó mágicamente, pero nunca hubo una solución real. Propusieron nuevamente cambiar el caño, pero se imaginarán la respuesta que obtuvieron.

Martes 23
Me informan que no consiguen los caños en las cercanías del edificio, y que la gente a la que regularmente le hacen pedidos no lo tendrán por un par de días. Probablemente para el jueves estén.

Martes 30
Llegan los caños. Cuando sacan los caños podridos, se dan cuenta de que van a tener que cambiar no sólo la sección que originalmente creían afectada, sino todo el caño hasta abajo (recordemos que estoy en un 4to piso). ¿Cuánto iba a demorar esta jodita? 10 (DIEZ) días.
¿Ven ahora a lo que me refería cuando dije que era rehén?

Octubre
Sábado 4
Así es, se dignaron a trabajar un sábado. Como tenía planes pendientes, mi madre se ofreció a quedarse mientras yo me iba a almorzar con una amiga y al release de Shards of Alara. Pero fui yo temprano para que ella no tuviera que perder todo el día en mi casa. Al pedo, obviamente, porque cuando llegué (9:39) todavía no habían llegado los plomeros. Durante el día me fueron dando los reportes de situación: entraron en el departamento a las 14:40; pusieron los caños nuevos, pero no así los codos (las uniones de las secciones de los caños); le sacaron otra pata al mueble de la cocina, que parece estar en precario estado y quedó apoyado sobre la cocina.
¡Un amor esta gente!

Viernes 10
Falto al trabajo para que haya gente en casa. Los señores no sólo vienen tarde, sino que lo único que hacen es un relleno de escombros. Tras putear largamente a puerta cerrada, decido que lo mejor es levantar campamento y volver a lo de mis viejos. En cuanto termino de pensar eso, vuelven a entrar a casa, donde pican los restos de las baldosas que habían quedado rotas.
Perdí todo un día de laburo para eso.
¿Por qué el ofuscamiento? Porque, a sabiendas de que iban a tener que hacer el relleno de todas maneras ¿por qué no llevaron el material de una buena vez y ya? Dos pájaros de un tiro.
Aumentan mis sospechas de que esta gente cobra por hora...

Martes 14
Ante la adusta vigilancia de mi hermano, hacen el relleno de material finalmente. Sólo queda poner las losas. Que obviamente no habían comprado todavía.

Jueves 16
Me informan que habían comprado las losas y que el lunes las iban a colocar.
Horas más tarde, mi hermano me avisa que el lunes y el viernes no iba a poder ir a mi casa. Sé que los viernes tiene nutricionista, y el lunes se encaprichó con que quería pasar por la oficina de su laburo, así que no iba a poder ser. Lo pospusimos para el martes.

Viernes 17
Caigo enfermo. No tiene nada que ver, dado que todavía no habían comprado las losas, pero quería comentárselos nomás.

Lunes 20
20:10 y estando aún en la oficina, me llega un mensaje de texto de mi hermano avisándome que no iba a poder ir a mi casa el martes (o sea, al día siguiente).
Puede que algunos de Uds -sino todos- tengan la impresión de que soy bastante desbolado (y lo soy), pero lo cierto es que también soy extremadamente organizado, y me molesta mucho que las cosas se salgan del plan si no es posible realizar alguna corrección. Éste era el caso. ¿Con quién podía arreglar a esa hora para que se quedara en mi casa? Ya a esa altura del partido, no podía hablar con mi jefe para quedarme (y aún si hubiera podido, no lo hubiera hecho, porque ya debía un día ése mes). Puteé y recontra puteé, pero tuve que posponer nuevamente el arreglo de mi piso, esta vez con la palabra de mi hno que iba a ir el miércoles.

Miércoles 21
Se presentan en casa y llegan a hacer la mitad del baño. Por qué no terminaron el trabajo, sólo Dios lo sabrá... Lo terminarían al día siguiente, según dijeron.

Jueves 22
Fueron, pusieron dos baldozas y se fueron. El muchacho que estaba trabajando le comentó a mi hermano que la señora de abajo se había puesto en hinchapelotas y le iban a terminar el trabajo primero a ella. En ese momento uno se habría preguntado ¿¡QUÉ CARAJO!? (WHAT THE FUCK!? for you, my English speaking friends), pero el incidente no pasó a mayores por no poder estar presente.

Viernes 23
Terminaron de poner las losas en el baño. La idea era dejarlo secar y que por la tarde me instalaran los artefactos, pero como mi hermano se tenía que ir al médico, sólo pudieron hacer la primera parte, aludiendo que iban a ir el día siguiente (sábado, por si alguno no conoce el calendario aún). Esto acarreó complicaciones varias, porque durante todo ese día yo tenía un torneo de Magic que ya había pagado. Por suerte mi viejo y Jose iban a hacerme el aguante ante tan desesperada situación (no sin que el primero me cagara a pedos al respecto).
A las 21.30 me llama Fabián (el plomero en jefe) y quería confirmar que hubiera gente el lunes para terminar el trabajo.
A ver, releamos la oración:
A las 21.30 me llama Fabián (el plomero en jefe) y quería confirmar que hubiera gente el LUNES para terminar el trabajo.
¿Cómo que el lunes? ¿No me habían dicho el sábado? Aparentemente el muchacho se debía haber confundido, ya que había que dejar secar las losas para poder instalar los artefactos. Alguien que leyera atento habrá notado el engaño enseguida: si había que dejar secar las losas durante un fin de semana ¿Cómo iban a instalar el resto del baño el mismo viernes por la tarde?
Desafortunadamente la secuencia lógica estuvo ausente en el momento de la conversación, por lo que no me quedó más opción que aceptar lo que me decían.

Lunes 27
A tres días de cumplirse el mes y medio, vinieron dos personas a terminar el trabajo. Me voy dejándoles un único pedido implícito: que vuelvan a poner la mariposa de la llave de paso de agua que habían sacado para mover el mueble de la cocina.
Vuelvo a las 17.10 para encontrarme FINALMENTE con el piso de mi casa. Desde ya, puesto al revés, pero ya nada importaba.
Ni siquiera que el monocomando del baño (la canilla del lavatorio, bah) se había roto y no consiguieron el repuesto porque era MUY CHINO. Sí, a mí también me suena a verso. O cuento chino, como prefieran.
Quedaron en arreglar con la administración para que les diera el Ok con el asunto.
Pero ya estaba la casa en condiciones vivibles.

Martes 28
Vuelvo a dormir a mi casa.

En fin, esas fueron mis aventuras y desventuras de casi mes y medio en casa nueva. Volví y me encontré con la casa toda sucia, con óxido en varios utensilios de cocina y vasos, partes sobrantes y arreglos por hacer. Pero son todas cosas menores. Ya volví.

Habrán notado que hay espacios entre fecha y fecha. Esto no se debe a la nimiedad de los trabajos que hayan hecho en esos días, sino a que, simplemente, no trabajaron en sendas fechas.
Por si alguno se pregunta por qué el paréntesis en el título, sepa que yo me mudé un 6 de septiembre y, como habrá leído -¡más te vale!- los arreglos comenzaron el 15 del mismo mes. Durante el tiempo que duraron las obras, yo tuve que volver a lo de mis viejos, pero aún peor que antes, porque ya no quedaban de mis efectos personales en dicho lugar...